jueves, 3 de abril de 2008

¿Por qué seguimos hablando del 24 de marzo?

Discurso pronunciado el 25 de marzo de 2008 en el Instituto Superior de Formación Docente Nº 127 "Ciudad del Acuerdo" de San Nicolás por Nicolás Lemme. Me pareció importante sumar a este Blog dicho discurso.


Estas palabras, intentaran generar y promover una reflexión acerca del episodio que sucedió hace 32 años atrás, más precisamente, un 24 de marzo.
Algunas encuestas han arrojado que los jóvenes de entre 20 y 28 años admitieron no conocer qué sucedió el 24 de marzo de 1976 y hasta confundieron la fecha con el día de la toma de Malvinas.
Para situarnos históricamente debemos saber que en 1976 cae derrocado el Gobierno de Isabel Perón por una Junta militar que estaba formada por el general Jorge Rafael Videla, el brigadier Antonio Orlando Agosti y el almirante Emilio Eduardo Massera. Esta junta se autodenomino “Proceso de Reorganización Nacional” y el presidente del país a partir de ese momento fue Videla. Las primeras medidas aplicadas fueron disolver el Congreso, imponer la ley marcial y gobernar por decreto. Los golpistas tuvieron un cierto apoyo de una parte de la población civil de nuestro país. Esta junta atacó las organizaciones políticas contrarias a su pensamiento, sentó las bases económicas del neoliberalismo que produciría luego las privatizaciones de muchas industrias estatales en la década del 90, combatió a los supuestos subversivos que eran aquellas personas que cuestionaban el sistema político y económico imperante de nuestro país, también secuestraron y torturaron a personas, violando así los derechos humanos.

El Estado generó una maquinaria represora sin precedentes en la Historia Argentina. No solo estaba planeada y organizada, o mejor dicho sistematizada, sino que llevó sus planes al terreno práctico logrando a corto y largo plazos sus objetivos.

Pero entonces ¿Por qué seguimos hablando del 24 de marzo?. Para comenzar debemos saber que es el día de la memoria por la verdad y la justicia. ¿Qué es la memoria? Según dicen algunos autores como es el caso de Jedlowski


“[…]Conviene entender la memoria colectiva como la selección, la interpretación y la transmisión de ciertas representaciones del pasado producidas y conservadas específicamente desde el punto de vista de un grupo social determinado.”


La memoria se presenta como un camino de verdad y justicia porque los pueblos que no tienen memoria cometerán sus mismos errores en el futuro. Como sociedad no debemos olvidar los hechos del pasado reciente porque ellos dejaron una huella muy profunda en nuestra sociedad y solo teniendo memoria de lo que ocurrió podremos lograr la justicia que se sigue exigiendo aunque hayan pasado 32 años.

Nosotros, como futuros profesores, poseemos una herramienta tan importante como lo es la formación de alumnos que logren entender la realidad y se involucren en la misma.

En nuestras manos está ser promotores de esta memoria colectiva para que las generaciones venideras tengan posibilidades de cambios en todo sentido social.

Aunque los avatares de nuestras democracias conlleven grandes problemas económico-sociales, no debemos dejar de valorar y recordar nuestros derechos y garantías constitucionales, defender la educación pública y gratuita; pues un pueblo educado y culto puede generar cambios profundos en un país. Es importante que se continúe siempre con la defensa de la formación de ciudadanos activos, instruidos; es fundamental la capacidad de pensar, de discernir críticamente sobre sus propias razones, de escuchar otras posiciones y la de buscar formas de consenso que permitan la convivencia con justicia, con tolerancia, con solidaridad y con respeto. Que el pasado reciente no se convierta en una moda porque como toda moda dura un tiempo. Tampoco nos detengamos mucho en el pasado porque solamente nos quedaremos detenidos en él sin poder avanzar ni miremos solo el presente porque así seguiremos cometiendo los mismos errores que en el pasado. Lo importante como sociedad es plantearnos el camino que debemos seguir para así poder lograr que el país pueda avanzar.


"Cada generación debe llegar como ola vigorosa a romperse contra la mole del pasado, para hermosear la historia con el iris de nuevos ideales. Juventud que no embiste, es peso muerto para el progreso de su pueblo".


José Ingenieros


Mucho se ha escrito pero restan muchos ríos de tinta para que la historia Argentina, pueda tener una visión mas clara, sobre lo que paso verdaderamente.


Nicolás Lemme

2 comentarios:

Martín Maglio dijo...

Muy buena reflexión.
Cuando te escuché me emocioné muchísimo. Tenés capacidad de reflexión y facilidad para resumir ideas sin dar vueltas. Escribís muy bien. No dejes de hacerlo.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Nico vos ya sabes que a mi mucho la historia no me gusta y hasta me resulta aburrida...pero como ya te dije, esto si me gusto...escribis muy bien...y sabes algo? no me aburria cuando lo estaba leyendo...y eso obviamente es porq vos lo haces llevadero e interesante....espero q no se enojen los fanaticos de la historia por lo q dije antes....
Besos! juli